El lanzamiento del primer estándar mundial de Soluciones basadas en la Naturaleza a cargo de la UICN representa una oportunidad única para multiplicar el alcance de intervenciones dirigidas a conservar y adaptar los ecosistemas en favor del bienestar social, permitiendo sopesar los pros y contras de estas mismas acciones. Como miembro del proyecto LIFE Adaptamed, la UICN nos ofrece en este artículo una primera aproximación a las acciones de restauración de pinares y acequias en el Espacio Natural de Sierra Nevada desde el punto de vista del estándar de SbN.
1. Responder eficazmente a desafíos sociales
Para cumplir este criterio, el estándar de SbN establece que un proyecto debe abordar los desafíos y problemáticas más urgentes que afectan a la sociedad y a las comunidades que ostentan derechos sobre los ecosistemas.
Desde el planteamiento inicial del proyecto LIFE Adaptamed, la restauración de las acequias de careo de Bérchules y Haza pretende preservar la cantidad y calidad de servicios ecosistémicos proporcionados por la comunidad de matorrales de alta montaña en Sierra Nevada ante la amenaza del cambio climático.
Sin embargo, si nos enfocamos en las necesidades más inmediatas para las comunidades locales, en la práctica esta acción responde a problemáticas como el estrés hídrico y la pérdida de suelo, factores que amenazan directamente la agricultura sostenible y la ganadería en las montañas de Sierra Nevada. La adaptación de las acequias de careo permite aumentar la disponibilidad del agua, haciendo que el agua del deshielo se filtre y descienda más lentamente, regando y manteniendo fértiles las tierras que se emplean para la agricultura y la ganadería.
La problemática de la disponibilidad de agua en esta zona, que también afecta a la llamada “Alpujarra seca”, se encuentra ampliamente documentada en estudios como los del Instituto Geológico y Minero de España (2015), encomendado por la Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía. Asimismo, las comunidades de agricultores y el mismo Consejo de Participación de Sierra Nevada han reiterado la necesidad de abordar esta situación de manera urgente. (ver referencias en adjunto)
La acción en cuestión tiene un resultado tangible y medible para el bienestar humano y natural: mediante la adaptación-restauración de las acequias (5 km en Bérchules y 2 km en Haza Mesa), se consigue aumentar la disponibilidad de agua en las comunidades de matorral de montaña en un 10%.
2. Adaptación a la dimensión
Este segundo criterio exige un análisis de las interacciones entre la entre la economía, la sociedad y los ecosistemas como parte de una cadena de impactos. En este sentido, podemos destacar cómo el aprovechamiento del agua del deshielo y la mejora de la disponibilidad del agua contribuyen a mantener unas huertas de notable valor económico. La misma pervivencia de este modelo de agricultura tradicional sostenible no sólo apoya la supervivencia de la actividad económica en este ámbito rural, sino que también favorece la conservación de los ecosistemas de alta montaña. Por otro lado, el agua aprovechada que se filtra y entra en acuíferos permite mantener la vegetación de media montaña.
En el apartado de sinergias con otros sectores, pese a no conocerse otro tipo de intervenciones directas en la zona, es importante mencionar que un grupo de científicos del Instituto Geológico y Minero de España y las universidades de Granada, Colonia y Lisboa ha investigado las acequias de careo en cuestión, demostrando que se trata del sistema de recarga de agua más antiguo de Europa.
En cuanto al análisis de riesgos internos y externos, se necesitaría una evaluación de los impactos potenciales de la acción para cumplir al cien por cien este criterio.
3. Ganancia neta en biodiversidad e integridad de los ecosistemas
Esta acción prevé la plantación de 1800 ejemplares de enebro común (Juniperus communis) y agracejo (Berberis hispanica), a las cuales se realizará un seguimiento de su supervivencia. Las siembras de enebro y agracejo asociadas a las acequias reparadas servirán para valorar el efecto positivo del mayor aporte hídrico sobre la regeneración de la vegetación en la zona. Además, se medirá la densidad de plantas en la zona (número de plantas por hectárea) y la diversidad de las especies. Anfibios como el sapo partero bético (Alytes dickhilleni), especie endémica cuyo estado es considerado vulnerable, podrán beneficiarse de la mayor disponibilidad de fuentes de agua dulce.
Previamente, el proyecto ha realizado un análisis y evaluación del ecosistema, en particular de la distribución del enebral-sabinar, la estructura del hábitat y los indicadores de funcionamiento. Esta información ha permitido identificar las zonas más idóneas para las actuaciones, tomando en cuenta las previsiones existentes sobre cambio climático.
4. Viabilidad económica
Respecto a este criterio, el estándar de Soluciones basadas en la Nauraleza requiere un estudio de la viabilidad económica que en principio no estaba previsto en el proyecto. No obstante, en comparación con el trasvase de aguas de otros embalses situados en zonas lejanas, cabe destacar que la restauración de las acequias de careo supone un coste claramente menor, además de aprovechar el agua del deshielo, que de otro modo se perdería.
Si atendemos a los beneficiarios directos de esta acción, podemos decir que serían tanto las comunidades de regantes y ganaderos de la zona, como la sociedad en general. En el apartado de los beneficios indirectos, todo indica que la de restauración de acequias y pinares tiene un impacto económico más amplio que el descrito, aunque sería necesario implementar estrategias e instrumentos para medirlo.
Si atendemos a la claridad en las fuentes de financiación, el hecho de que se trate de un proyecto LIFE, liderado por una administración autonómica como la Junta de Andalucía, garantiza que todos los costes están justificados y documentados.
Por último, este criterio del estándar exige tomar en cuenta la variedad de fuentes de recursos, entre las que podemos destacar el apoyo voluntario de las comunidades de regantes, así como la contribución comunitaria de una empresa privada de la zona como es Aguas Lanjarón S.A (actualmente Aguas Danone).
5. Procesos de gobernanza inclusivos, transparentes y emponderadores
El estándar de SbN requiere el diseño de las acciones emane de un proceso consultivo, inclusivo y transparente, que implique a los actores presentes en la zona. En este sentido, y como parte de las acciones preparatorias, los trabajos de LIFE Adaptamed han sido previamente consensuados con las comunidades de regantes, ganaderos y otros grupos de interés local, representados en el Patronato del Espacio Natural.
(enlace a documentación de reuniones con comunidad de regantes)
Las mismas comunidades de regantes y el Ayuntamiento de Bérchules han colaborado activamente en la adaptación de la acequia de careo, mientras que, los ganaderos fueron consultados sobre las características y ubicación concreta de los vallados temporales para la protección de plantaciones.
Ese proceso ha sido luego llevado al Patronato del Espacio Natural, que gestiona el modelo de gobernanza de todo el parque y es el encargado de la resolución de conflictos en caso de que los hubiera. Cabe destacar que, dentro de un afán democrático y emponderador, el estándar de SbN hace hincapié en los principios de igualdad, respeto (independientemente del género, la edad o la condición social) de las comunidades locales.
6. Equilibrio equitativo entre logro de objetivos y provisión constante de múltiples beneficios
Este criterio se centra en la gestión y equilibrio de los potenciales efectos negativos de la intervención y de la consecución de sus fines. Puesto que no se ha identificado ningún riesgo o efecto negativo que pudiera manifestarse, en este caso el proyecto no prevé un mecanismo o acuerdo de gestión de esos riesgos potenciales.
7. Gestión adaptativa, con base en datos
La gestión adaptativa desempeña un papel importante en LIFE Adaptamed. En el caso de la restauración de acequias, la elección de las zonas de la acción se realizó basada en previsiones de cambio climático más precisas existentes para Sierra Nevada.
Antes de comenzar las acciones de restauración de acequias, el equipo de LIFE Adaptamed ha realizado un modelado hidrológico, que permitirá comparar la humedad en la actualidad con la humedad predicha por los escenarios climáticos e identificar oportunidades para aumentar la resiliencia y la conectividad del ecosistema. El seguimiento de los indicadores de efectividad, relativos a los servicios ecosistémicos, será realizado de manera regular por la Consejería de Pesca, Agricultura y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía y la Agencia Medio Ambiente y Agua.
Por otro lado, LIFE Adaptamed incorpora un potente sistema de información interrelacionable y georeferenciada, que presenta tanto la información generada por todas las acciones, como otras fuentes de información de carácter regional o local del sistema de información ambiental de Andalucía (REDIAM). De este modo, los datos sobre los resultados del proyecto serán conservados y empleados para extraer conclusiones y permitir el aprendizaje iterativo, tanto durante como después de la intervención.
Asimismo, el proyecto mantiene una colaboración mutua con el Observatorio de Cambio Global de Sierra Nevada.
8. Sostenibilidad e integración en contexto jurisdiccional
Aprovechar las lecciones aprendidas de una intervención y hacer que estas sean accesibles a un público amplio, para impulsar el cambio transformador, forma parte del criterio de sostenibilidad del estándar de SbN. En este sentido, tanto la página web como las redes sociales del proyecto se encargan de dar visibilidad a los resultados. Del mismo modo, se han instalado paneles informativos en los tres espacios naturales donde se llevan a cabo acciones.
Además, el aprendizaje sobre mejores prácticas de gobernanza en el contexto del cambio climático está siendo recogido en un manual que pretende apoyar a las Juntas Rectoras y los Consejos de Participación de los tres espacios naturales del proyecto (Doñana, Cabo de Gata y Sierra Nevada), los cuales son órganos obligatorios según la Ley de Espacios Protegidos de Andalucía.
Lo que es bueno para la biodiversidad, también lo es para nuestras sociedades
Cooperar con la naturaleza para hacer frente a desafíos de las sociedades como la pérdida de biodiversidad o el cambio climático: este es el principio sobre el que se basa el concepto Soluciones basadas en la Naturaleza. La UICN define las Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN) como “acciones para proteger, gestionar de manera sostenible y restaurar ecosistemas naturales o modificados, que abordan los desafíos sociales de manera efectiva y adaptativa, proporcionando simultáneamente beneficios para el bienestar humano y la biodiversidad.”
La promoción del primer estándar de SbN, junto con la publicación de unas orientaciones prácticas abre la puerta para avanzar en la implementación de estas acciones, además de ofrecer asesoramiento a las instituciones y profesionales que las aplican.
Este análisis se basa en la acción C5 del proyecto LIFE Adaptamed, “Gestión adaptativa para la protección de servicios ecosistémicos ante el cambio climático en matorrales de alta montaña mediterránea”.
Otros ejemplos :
Documento gráfico de otra zona de Sierra Nevada donde los regantes demuestran entender la importancia de estas acequias
https://www.youtube.com/watch?v=QFkJ9kOs2kc